Continúan las investigaciones para determinar lo ocurrido en el telesilla de Astún

Astún intenta volver a la normalidad tras un sábado difícil, en el que tuvo lugar el grave accidente del telesilla Canal Roya, en el que se vieron afectadas 30 personas, de las cuales dos heridas graves que continúan ingresadas en la UCI. La estación de esquí ha retomado hoy su actividad con la asistencia de cientos de esquiadores que han disfrutado de un día soleado. Mientras tanto, continúan las investigaciones. “Lo que sabemos es lo que ha pasado, no sabemos por qué ha pasado”, ha asegurado Andrés Pita, subdirector de Astún.

Para aclarar lo sucedido, se han abierto tres líneas de investigación. La primera es la de la Policía Judicial, que este domingo continuaba trabajando en los atestados e informes. La segunda es una investigación administrativa que estará a cargo del departamento de transporte por cable del Gobierno de Aragón, junto a sus técnicos. Por último, la estación también llevará a cabo su propia investigación.

Pita comenta que “nuestros técnicos, en colaboración con el fabricante, están en contacto para que, una vez que el lugar esté despejado, podamos intervenir y realizar las investigaciones necesarias”. Con estas acciones, se espera obtener una comprensión clara de lo ocurrido y las razones detrás de ello. “Tomaremos las medidas necesarias para evitar que algo así vuelva a suceder, ya que se trata de un accidente que nunca había visto antes y no debería ocurrir”, concluye.

Andrés Pita ha explicado que se salió del eje el volante del reenvío del telesilla, lo que produjo un destensado de la línea del cable, que bajó un metro y medio en horizontal en el reenvío y casi dos metros en la línea. Produjo destensión del cable «y el bamboleo correspondiente», explica Pita. Las sillas que estaban próximas al desembarque chocaron con el suelo, y es ahí donde estaban los heridos de mayor consideración. El resto «han sido heridos de menor consideración, fruto del golpe del movimiento de las sillas».

Revisiones

El telesilla de Canal Roya se inauguró en 1990 y había pasado todas las revisiones. «La legislación de transportes por cable del Gobierno de Aragón es muy exigente, si no la más exigente de España de las más», asegura Pita. Todas las instalaciones de las estaciones de esquí pasan obligatoriamente las revisiones, y «no se deja abrir una sin que pase las revisiones correspondientes. Son revisiones profundas y exhaustivas».

El subdirector de la estación subraya que el transporte por cable es un medio de transporte «muy seguro», lo que no quita a que haya accidentes, que es por desgracia lo que ocurrió ayer en Astún. «No tendría que pasar y se va a trabajar en conocer las causas y minimizar los riesgos, pero el riesgo 0 no existe», indica.

Los remontes en las estaciones de esquí tienen un calendario de revisiones que varía según el tipo de instalación, ya sea una cinta, un telesquí, un remonte o un telesilla. Según Pita, todo esto está regulado por la ley. Hay revisiones ordinarias que se realizan anualmente y revisiones extraordinarias. En el caso de Canal Roya, la última revisión extraordinaria se llevó a cabo en 2021, y la próxima está programada para 2026.

Es importante destacar que estas instalaciones no operan las 24 horas del día durante todo el año, pero siguen un riguroso calendario de revisiones. La revisión extraordinaria implica desmontar completamente la silla y volver a montarla, un proceso que es bastante exigente y requiere mucho tiempo, esfuerzo y recursos. Sin embargo, se realiza cada vez que la ley lo exige para garantizar la seguridad y el buen funcionamiento de los remontes.

Coordinación

Una vez que se produjo el accidente, la coordinación de los servicios de emergencia funcionó muy bien, tal y como destacan desde Astún. «Lamentando el accidente, tenemos que estar satisfechos con el servicio de rescate y la evacuación de los heridos, ya que hubo un despliegue impresionante y se hicieron las cosas bastante bien», asegura Pita. En dos horas y media se evacuó la totalidad de la línea de la silla, donde había más de 200 personas.

Este domingo la estación ha abierto con normalidad todas sus instalaciones, excepto la silla de Canal Roya, que permanecerá cerrada «hasta que se solucione el tema». Andrés Pita dice que no tienen prisa en abrirla esta temporada, ya que «todo lleva su cauce», y ahora seguirán «garantizando la seguridad y normalidad en el resto de instalaciones».

Muchos esquiadores han acudido este domingo a Astún para disfrutar del esquí en un día soleado. «Creo que son conscientes de que ha sido un accidente», concluye el subdirector.